#0100 LLamado pidiendo la LLama Violeta Transmutadora (Saint Germain)
Hoy celebramos el 100º envío de “Amantes de La Enseñanza” (parece mentira!), y quiero aprovechar este aniversario para tratar algo muy específico. Entre la múltiple correspondencia que recibo, me llega toda clase de consultas con relación a la angustia que les produce estar concientes(?) de que “éste es el Año del Fin del Mundo”, que si éste es “el año de la Prueba y la Angustia”…, etc., y me piden consejos en cuanto a cómo hacerle FRENTE a esto.
Uno que otro manifiesta su duda en cuanto a la Enseñanza, al preguntar: “¿bastará con sólo usar el Fuego Violeta? ¿No habrá algo más que podamos hacer?”… Y yo me pregunto: ¿Algo MÁS? ¿Acaso no basta con el Conocimiento y Uso del Fuego Sagrado que los Maestros nos han “bajado”, conocimiento éste que durante eras enteras se mantuvo celosamente alejado de la gente y reservado a los sacerdotes de los templos, y al cual ahora todos tenemos acceso con tan sólo pedirlo, con ir a una librería, con tener acceso a la Internet?…. ¿”bastará con SÓLO usar el Fuego Violeta”?… “¿habrá algo MÁS que podamos hacer…?”
Es que cuando recibo consultas como éstas, entiendo plenamente lo que aparece en “El Libro de Emmanuel” en cuanto a que “el pecado original no fue la sexualidad sino la duda”. Esto no es un regaño, Amados Míos, sino un exhorto a la ACCIÓN, con el impulso y el entusiasmo del Rayo Azul-Cristal que se requiere para dispar toda apariencia de MIEDO en nuestras vidas. Dejemos por fuera toda sugestión externa (sea cual fuere, venga de donde o de quien viniere) que conspire contra la armonía de nuestros sentimientos, pongamos la atención sobre la Perfección de la “Magna Presencia YO SOY”, y utilicemos nuestros tres centros creativos (pensamiento, sentimiento y palabra hablada) para llevar a cabo la misión para la cual encarnamos: Manifestar la Plenitud de la “Presencia”. Es con este ánimo que la selección #100 de “Amantes de La Enseñanza” nos las trae el propio Maestro Ascendido SAINT GERMAIN. Reflexionemos sobre lo contemplado en este escrito, y luego unámonos al Maestro con alma, vida y corazón en el siguiente Llamado:
Amada Magna y Victoriosa “Presencia de Dios YO SOY” en mí, Santo Ser Crístico mío y de toda la humanidad, Amado Saint Germain y todos aquéllos que tengan que ver con la descarga de la Llama Violeta Consumidora del Amor, Misericordia y Perdón del Cristo Cósmico para la Tierra y Sus evoluciones:
Que Su Fuego Violeta SURJA en, a través y alrededor mío, de todo mi ser y mundo —AHORA MISMO— en este instante y para siempre! ¡Que FLAMEE con Su dinámico Poder Cósmico, doblado en cada instante de cada hora, transmutando instantáneamente y para siempre en la Sustancia-Luz de Pureza y Perfección de los Maestros Ascendidos, toda la energía de Vida que yo erróneamente haya calificado mediante pensamientos, sentimientos, palabras habladas o acciones discordantes, en cualquier parte, en cualquier momento, de cualquier manera, por la razón que fuese! Que este Fuego Violeta elimine por completo —en este instante y para siempre— las CAUSAS y NÚCLEOS de todas las limitaciones humanas y aflicciones que yo haya creado alguna vez en mi propio mundo y en el tamaño de otros; así como también todo lo que sea de naturaleza destructiva que alguna vez haya sido dirigido a mí, y que yo haya aceptado en mi mundo.
REEMPLACEN en mi mundo todo lo que Dios nunca pretendió que existiera, con la plenitud de los sentimientos de Amor Divino, Pureza, Paz y toda Cualidad Divina de Perfección de los Maestros Ascendidos, así como también el SENTIMIENTO de perfecta satisfacción de mi Santo Ser Crístico.
Que el Santo Ser Crístico también cargue mi mundo (al tiempo que es purificado por este Fuego Violeta) con Su Inteligencia Directriz, Decisión, Coraje, Fortaleza y Poder de los Maestros Ascendidos, y con todo lo que se requiere para permitirme hacer la Voluntad de Dios en todo momento al máximo de mis habilidades, realizando así mi propio Plan Divino. Que lleve la totalidad de mundo al perfecto Orden Divino a través del Amor Divino y que lo sostenga allí, produciendo y sosteniendo en mí la perfecta salud, y manteniéndome suministrado en todo momento con la ilimitada abundancia de dinero y toda cosa buena. Que todo esto venga como un agradable y gratis Regalo de Amor, visible y tangible en mis manos y uso, invenciblemente protegido en todo respecto.